«Os toca mover la red, la calle y pintar escenarios en los que la rebeldía pueda ser practicada. Movedlo porque nos han hecho cosas intolerables».Se puede decir más alto, pero no más claro y ese el modo en que Elena Valenciano, la vicesecretaria general del PSOE, se dirige a los españoles para animarles a que se movilicen contra el gobierno de Mariano Rajoy.
La frase mencionada se la dirigió el viernes a las bases del partido, los miembros de Juventudes Socialistas reunidos en el congreso que este domingo, 29 de abril de 2012, se ha clausurado en Madrid.
Pero el lunes anterior ya había lanzado el mismo mensaje a toda la sociedad en una rueda de prensa desde Ferraz, en la que dijo:
«Todo está abierto y debemos utilizarlo porque, o paramos nosotros al gobierno del PP en esta deriva o el Gobierno del PP parará a la sociedad española».
Como explica con detalle '
ABC', no era la primera arenga. Aún antes, el jueves 19 de abril de 2012, Elena Valenciano se estrenaba en este papel de exaltadora profesional proclamando desde la sede del PSOE:
«Los españoles tienen derecho a reaccionar en defensa propia contra los recortes del PP».
La excusa para multiplicar los llamamientos a la calle son los sucesivos recortes del PP, que tratan de salvar in extremis una economía rota heredada de un PSOE que ahora mira para otro lado como si no tuviera ninguna responsabilidad.
Lo llaman
«oposición útil».Echar gasolina al fuegoEn los cuatro meses que lleva gobernando Mariano Rajoy, la oposición de Alfredo Pérez Rubalcaba ya ha tenido que enfrentarse a al acusación de estar echando gasolina al fuego del malestar ciudadano con el fin de precipitar una explosión social.
La sensación de que el PSOE no tiene ningún inconveniente en aprovechar la calle para tratar de lograr lo que le negaron las urnas cundió con motivo de las violentas protestas juveniles que se desataron en Valencia en el mes de febrero.
Entonces, hubo en principio cierta tendencia al repliegue en las filas socialistas, con sus dirigentes asegurando en todos los foros donde se les preguntó que su intención no era crear un clima de conflicto, ni convocar manifestaciones.
Pero Rubalcaba dejó las cosas claras y reclamó en Oviedo:
«El derecho de manifestación está consagrado en la Constitución y los españoles se manifiestan libre y pacíficamente cuando quieren, y el PP lo ha hecho durante 8 años, y el PSOE lo hará porque ejercemos nuestro derecho».
El testigo lo ha recogido Elena Valenciano, que empieza a especializarse en agitación.
Este sábado 28 de abril de 2012 contestó la vicepresidenta Soraya Sáez de Santamaría:
«Algunos invitan y dicen que hay que salir a la calle. Si yo hubiera dejado el país como lo han dejado ellos, me daría vergüenza salir de casa».
Menudos obreros que no salen a protestar porque llueve!
El País lo achaca a que no salen a protestar por la lluvia y el puente
Banderas republicanas con la hoz y el martillo en la madrileña plaza de Cibeles. 29 de abril de 2012 01
Cándido Méndez conversa con José Ricardo Martínez. 01
Cándido Méndez. 01
El sindicato único con dos sucursales, UGT y CCOO, se está ganando las subvenciones, ya que en los últimos meses ha sacado a sus afiliados a las calles para protestar contra el Gobierno del PP. Este 29 de abril de 2012 lo hicieron de nuevo y el motivo fueron los recortes en los servicios públicos. "Con la sanidad y la educación no se juega" fue su lema. Como mañana es el Primero de Mayo, se trataba de un calentamiento (bajo la lluvia, eso sí). El resultado es distinto según el periódico y la radio a la que acudamos.
El País da una foto cuyo pie comienza con un esperanzador "La calle mantiene el pulso" y concluye con un acongojante "En Madrid (foto), la afluencia fue menor por la lluvia y el puente". ¡Menudos obreros que no salen a protestar porque llueve! Seguro que Lenin los habría deportado a Liberia para que aprendiesen a hacer la revolución.
Nino Torre. 01
Elena Valenciano. 01
Oscar López. 01
Nino Torre. 01«Os toca mover la red, la calle y pintar escenarios en los que la rebeldía pueda ser practicada. Movedlo porque nos han hecho cosas intolerables».
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