domingo, 19 de agosto de 2012

Endogamia musulmana

Mahoma autorizó los matrimonios entre primos hermanos hace 1.400 años. Las consecuencias están siendo devastadoras.

Las consecuencias para los hijos de los matrimonios consanguíneos son desagradablemente evidentes: la muerte, la baja inteligencia o el retraso mental, la discapacidad y las enfermedades que a menudo conducen a una muerte lenta y dolorosa.

Otras consecuencias son: La capacidad limitada para manejar los procedimientos de educación y trabajo. Las consecuencias cognitivas negativas también influyen en las funciones ejecutivas. El deterioro de la concentración y el control de las emociones conducen a menudo a una conducta antisocial.
     
Los costes económicos y las consecuencias para la sociedad de la endogamia son por supuesto secundarios con relación al dolor humano.

Sin embargo, la endogamia entre los musulmanes tiene graves consecuencias tanto para las sociedades occidentales como para ellos mismos.

Los gastos relacionados con inmigrantes musulmanes, discapacitados físicos y mentales, drenan el presupuesto para otros servicios públicos: “Cuando primos tienen hijos en común, ellos tienen el doble de probabilidades de tener un hijo con discapacidad, que deberán ser mantenidos por el Estado. Sólo en el distrito de Copenhague, el número de niños discapacitados aumentó un cien por cien en 10 años. Meredith Lefelt ha contactado con 330 familias con niños discapacitados en Copenhague. Ella cree que un tercio de sus clientes tienen un trasfondo cultural extranjero.
   
Otro problema adicional son los gastos que ocasionan estos enfemos nacidos de padres emparentados, quienes no son capaces de vivir de acuerdo con los retos de nuestro mercado de trabajo occidental. Los inmigrantes musulmanes y sus descendientes en Europa tienen una tasa muy alta de desempleo.

Lo mismo ocurre con los musulmanes en EE.UU., donde el Instituto Gallup hizo un estudio que incluyó a 300.000 personas. Entre sus conclusiones destaca ésta: “La mayoría de los musulmanes en EE.UU. tienen un menor ingreso, son menos educados y tienen peores trabajos que la población en su conjunto”. (Berlingske Tidende, 3 de marzo de 2009).

Las consecuencias cognitivas de la endogamia musulmán podría explicar por qué los inmigrantes no occidentales tienen un 300 por ciento más de probabilidades de fracasar en la prueba de inteligencia que lleva a cabo el Ejército danés. “El 19,3% de los inmigrantes no occidentales son incapaces de pasar los test de inteligencia del Ejército danés. En comparación, sólo el 4,7% de los solicitantes con antecedentes daneses no pasa “. (TV 2 Nyhederne, 13/6 2007). Los inmigrantes reprueban estas pruebas.
    
Probablemente esto explique- al menos parcialmente – por qué dos tercios de los niños escolares con antecedentes árabes son analfabetos después de 10 años en el sistema escolar danés: “Los que hablan árabe con sus padres tienen una tendencia extrema a la falta de habilidades lectoras – el 64 por ciento son analfabetos. No importa si se trata de la capacidad de lectura, las matemáticas o las ciencias, el patrón es el mismo: Las habilidades bilingües (principalmente musulmanes) de los inmigrantes son muy pobres en comparación con sus compañeros daneses” (Unidad de Investigación de la Fundación Rockwool, mayo de 2007).

Los altos costes de la educación especial para alumnos lentos consume una tercera parte del presupuesto para las escuelas danesas. “Los niños inmigrantes en las escuelas de Copenhague para deficientes sobrepasa el 50 por ciento. Los niños discapacitados son una clara evidencia de los matrimonios consanguíneos entre inmigrantes”.
    
Nuestro alto nivel de educación también hace más difícil que los estudiantes endogámicas puedan concluir sus estudios. Los jóvenes pertenecientes a minorías tienen una tasa significativamente más alta de fracaso escolar en las escuelas secundarias que los jóvenes de origen danés. El abandono escolar entre los inmigrantes es del 60 por ciento, dos veces más alta que entre los adolescentes de origen danés.

Existe una gran variación en los resultados educativos, en comparación con el origen nacional. Por ejemplo, el abandono escolar entre los jóvenes de procedencia libanesa e iraní es mucho mayor que entre las personas de origen vietnamita. (Centro para el Conocimiento sobre la integración en Randers, mayo de 2005 La juventud, la educación y la integración). “Entre los hijos de inmigrantes que nacen y se crian en Dinamarca, más de un tercio carece de estudios primarios, mientras que entre los daneses nativos es menos de la quinta parte.
Las consecuencias negativas de la endogamia puede explicar por qué sólo nueve musulmanes lograron el prestigioso Premio Nobel
                                      
La capacidad limitada para comprender, valorar y producir conocimientos a raíz de una inteligencia limitada es, probablemente, también en parte la razón por la cual los países musulmanes producen una décima parte de la media mundial en lo que respecta a la investigación científica: “En 2003, el promedio mundial para la producción de artículos por millón de habitantes fue de 137, mientras que ninguno de los 47 países de la OCI para los que existían datos alcanzó una producción por encima de 107 por millón de habitantes. El promedio de la OCI sólo tenía 13 años. ” (Naturaleza 444, p 26-27, 1 de noviembre de 2006. “. Islam y la ciencia: La brecha de datos”).

La falta de interés por la ciencia y el desarrollo humano en el mundo musulmán es también evidente en este dato que ofrece Naciones Unidas. Informes árabes sobre Desarrollo Humano (IDHA) destacan que ha habido menos libros traducidos al árabe en los últimos cien años que la cantidad de libros que se traducen en España cada año.

“El mundo árabe traduce alrededor de 330 libros al año, la quinta parte de lo que se traduce en Grecia. El total acumulado de libros traducidos desde el Maa’moun Califa [sic] el tiempo (siglo IX) es de aproximadamente 100.000, casi la media de lo que en España se traduce cada año”. (Eugene Rogan “Los libros árabes y el desarrollo humano”. Índice de la Censura, vol. 33, número 2 abril de 2004, p. 152-157). “El 70 por ciento de los ciudadanos turcos nunca lee libros.” (APA, 23 de febrero de 2009 “)

Conclusión

Los matrimonios masivos consanguíneos en la cultura musulmana han hecho un daño irreversible en su herencia genética, lo que ocasiona deterioros psiquicos, del cociente intelectual y de la salud. La mitad de los musulmanes a nivel mundial son descendientes consanguíneos. En Paquistan son el 70%. No hay duda de que la tradición musulmana de los matrimonios entre primos hermanos ha perjudicado a esa comunidad. El hecho de que los musulmanes prohíban los casamientos con no musulmanes evita la aportación de material genético fresco a su población. El profeta Mahoma autorizó los matrimonios entre primos hermanos hace 1.400 años. Las consecuencias están siendo devastadoras.

La compasión por la salud de las generaciones futuras de musulmanes debería ser base suficiente para prohibir los matrimonios entre primos hermanos. Las consecuencias económicas y sociales también cuentan. Una prohibición legislativa de matrimonios entre primos primeros es un imperativo lógico y compasivo, tanto para el mundo musulmán como para la UE y las naciones occidentales en las que viven millones de ellos.

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