Militantes y simpatizantes de la izquierda separatista catalana hacen proselitismo en las puertas de las mezquitas. Pretenden así sumar adeptos a la causa del soberanismo entre la creciente comunidad musulmana. A unos y a otros les une el mismo odio a España y a la cultura que la representa.
El pasado viernes, un ex dirigente de la Crida instaló un cartel frente al centro islámico de Igualada. El mensaje no podía ser más explícito: “El soberanismo catalán es integrador con los musulmanes”. Jóvenes de la izquierda radical catalana repartieron folletos entre sus “hermanos” musulmanes. “Unos y otros debemos construir la nación catalana frente a España”, señaló a un portal de internet Sergi García (sic), uno de los promotores de esta campaña de captación de muyahidines por la independencia.
El presidente de la Generalitat Artur Mas y varios integrantes de su Govern tienen previsto participar en un acto de apoyo a la comunidad musulmana de Cataluña durante el ramadán. Este acto consistirá en la participación de Mas y su equipo en una de las rupturas del ayuno (iftar) que tienen lugar este mes, sagrado para los musulmanes.
El ‘iftar’ se trata de la comida nocturna con la que se rompe el ayuno diario durante el mes islámico del ramadán. Suele hacerse de manera comunitaria, con grupos de musulmanes que se reúnen para romper el ayuno. Tradicionalmente, la típica sopa (harera) es el primer alimento que se consume. Le siguen dátiles, carne de cordero o de pollo y productos de la empalagosa repostería árabe, sin que falte el inevitable té a la menta.