martes, 18 de septiembre de 2012

ojala no descanses en paz..

Ha muerto Carrillo, una de las piezas fundamentales en la venta de España en la Guerra Civil y que finalmente lo logró en la transición, en 1978.   Ha muerto uno de los grandes beneficiados por Juan Carlos con su autogolpe del 23F. Ha muerto un genocida que no permitió defensa ni juicio justo a tanto inocente. Le espera el implacable juicio de Dios. España ahora está en Paz.   
Hablar sobre este personaje, sin que a uno se la abran las carnes, no resulta fácil. Para cualquiera con algunos años, y que tenemos la memoria intacta y bien alimentada de infinidad de libros, de todo pelaje, sobre los hechos acontecidos en Españas desde 1931 en adelante, conocemos bien a fondo las andanzas del joven socialista, primero, comunista después, Santiago Carrillo. El odio a los valores occidentales traidos desde la Rusia comunista se apoderó de nuestra Patria. 
Sabemos por los testimonio de tantos que fue esa misma republica rusa, comunismo y dictadura, la que dividió a los españoles. Aquí venían con propaganda contra la propiedad privada, la iglesia, la vida en libertad y la libertad de vivir. Que las consignas internas una vez alcanzado el poder eran aniquiliar a esas trabajadoras clases medias, y qué diremos de las amañadas elecciones del 36; sí, amañadas.

La actual historia de esta mal llamada democracia, que amnistió generosamente al personaje en cuestión, no ha sido, al parecer tan magnánima, como para provocar un arrepentimiento de los crímenes de su juventud. Es más, alguna universidad lo ha colmado de honores. Si, esto es España, que ensalza a criminales y desprecia a sus mejores hombres.                       ya no estas suelto hijo de putaa
Y vivimos cada día con la ignominia de aquellos que nos quieren hacer comulgar con palabras de las que no conocen su significado, como libertad, honor, democracia y demás monsergas.
   
Bien se han encargado, estos señores honorables que parieron la Carta Magna del 78, de hacer una claudicación al bando vencido de la guerra civil, de repartirles el Estado y concederles toda clase de privilegios. Como si tuviéramos que pedir perdón por haber llevado a España, tras una guerra civil, por ellos buscada y deseada desde 1934, (léanse actas del Congreso de aquella época), a la modernización, colocación de los cimientos de una sociedad moderna, de la creación de una clase media, esta que hoy, ellos mismo quieren erradicar, y que entonces no lo consiguieron.
 
Hoy descansan en paz miles de españoles asesinados sin otra causa que ser cristianos, o no transigir con las ideologías totalitarias de estos asesinos comunistas. Porque señores, el comunismo, solo ha traído muerte y pobreza allí donde se instala, más de 50 millones de muertos desde 1917. Aquí Carrillo fue el comisario de Lenin, la mano ejecutora de esa ideología exterminadora y totalitaria, que gracias a muchos y a la generosidad de tantos ha permitido que este asesino no haya sido juzgado.
 
Hoy descansan en paz, como decía, esos mártires y sus descendientes actualmente vivos. Espero y deseo que este asesino pene por sus crímenes por toda la eternidad.
 criminal  hijo de  la  gran  puta...Si ayer asistíamos a la despedida de un personaje importante de la política actual española, Dña. Esperanza Aguirre, hoy, nos tomamos el café, con la definitiva despedida del asesino Carrillo. Y digo bien lo de asesino, porque fue el directo responsable de miles de muertes sin justificación, ni juicio previo con un mínimo de garantías. Muertes movidas por el odio y el resentimiento. Muertes, por las que jamás ha pedido perdón o ha mostrado arrepentimiento alguno.
 
Su afán de protagonismo en aquellos años le hizo aventajarse respecto de sus camaradas en la traída y llevada de checas a “paseíllos”, fosos y fosas comunes, con el único fin de medrar y llegar a ser alguien dentro de su partido.El odio a los valores occidentales traidos desde la Rusia comunista se apoderó de nuestra Patria. Luego la España que aún tenía decencia tuvo que cortar con ese mal y ante la desintegración de una Nación que había sido un Imperio, debieron salir a defenderla, porque la entrega no iba a ser ni siquiera al pueblo soberano sino a la misma Rusia comunista que había hecho otro genocidio en tierra propia. Por eso destados miembros del Partido Comunista estaban en España.
 
UN GENOCIDA INMUNE A LA JUSTICIA
 Santiago Carrillo mató a más de 4.000 personas (8000 según algunas fuentes) en Paracuellos del Jarama, cientos de ellos niños, y no solo no se arrepintió nunca de ello, sino que alardeó siempre de su papel en la guerra civil a sabiendas de que la unidireccional “memoria histórica” estaba de su parte. Por desgracia, Carrillo no ha sido juzgado antes de su muerte. Sin embargo, su nombre será siempre sinónimo de matanza, genocidio y odio.
 
En los últimos años se habían sumado voces que destacaron la improcedencia de que la Universidad Autónoma de Madrid le concediera el premio “Doctor Honoris Causa”, al considerar que esto implicaba deslegitimar los mismos fundamentos universitarios al premiar con dudosos honores a un criminal de guerra que ordenó asesinar sin juicio previo a miles de civiles inermes.
 Las matanzas de personas indefensas no constituyó un hecho aislado en la zona republicana durante la contienda civil, sino que cualquier ciscunstancia adversa, como sus contínuos errores bélicos, les servía de pretexto para cebarse con los inermes presos de las cárceles, y así sucedió con decenas de miles de víctimas desde los comienzos de la contienda hasta sus últimos coletazos:       las matanzas colectivas en El Arahal (Sevilla), donde anticipándose a la llegada de las fuerzas nacionales, los milicianos incendiaron el módulo donde tenían encerrados a sus oponentes, muriendo abrasados. Los marinos de Cartagena arrojados al mar, los fusilamientos masivos de las prisiones de Ubeda, Ciudad Real, Toledo, Almería, Lérida, Málaga, San Sebastián y el fuerte de Guadalupe, Castellón, Ibiza, Fuenteovejuna, Albacete…  Por lo que a Madrid concierne, el genocidio de Paracuellos, con su torrentera de sangre, vino a constituir la culminación de masacres anteriores, como la del Cuartel de la Montaña, amén de los miles y miles de madrileños y de madrileñas asesinados en cualquier lugar por las innumerables checas que gozaban de facultad para registrar, detener, torturar y ejecutar a las víctimas que no pudieron escapar del terror rojo en los meses anteriores.                           
Ser sospechoso de “derechista”, haber acudido a misa con regularidad, tener alguna afinidad ideológica improcedente, poseer periódicos del tipo ABC, haber ocupado algún cargo público en la etapa anterior, o simplemente no comulgar con los postulados del Frente Popular, eran los motivos por los que fueron retenidos miles de civiles en las cárceles de Madrid para posteriormente recluirlos en las famosas checas donde los torturaban y vejaban. Y de ahí a las sacas, para fusilarlos en las afueras.
 Máximo responsable del Holocausto de Paracuellos del Jarama

El periodo mas activo fué del 7 de noviembre al 4 de diciembre de 1936. Los asesores soviéticos del Partido Comunista, dominante ya en ese momento en Madrid, dictaminaron que era necesario exterminar a todos los disidentes (detenidos por el simple hecho de no ser de izquierdas) que abarrotaban las cárceles de la ciudad.

Lo que se hizo fué una limpieza literal de todos los civiles apresados que no pudieron escapar de Madrid al inicio del conflicto, en una clara acción criminal de “tierra quemada” en la retaguardia, por si llegaban los nacionales. Santiago Carrillo era el responsable municipal de Orden Público de la Junta de Defensa (imagen:http://bremaneur.files.wordpress.com/2009/01/y143-41011-021.jpg)
y por tanto, era el encargado de elaborar, supervisar, organizar y ordenar el trayecto de las checas hasta los lugares donde se produjeron sin juicio los asesinatos masivos.
 
Miles de civiles y de adversarios ideológicos, incluidos sus familiares, fueron asesinados de forma colectiva e indiscriminada en distintas fases, sembrando así las afueras de Madrid de cadáveres multitudinarios, desapariciones humanas, torturas y fosas comunes de muy amplio rango. Un grupo de ellas se encuentran localizadas en Paracuellos del Jarama. (Ver plano de las 7 fosas comunes: http://lh3.ggpht.com/-A1IQ6IP0MEY/TanUmqXf-iI/AAAAAAAAAGY/R9qdlNkb4Zw/planoFosas1.jpg).
Santiago Carrillo, uno de los españoles más siniestros del siglo XX.

No hay comentarios:

Publicar un comentario